jueves, 5 de marzo de 2015

Boda de ladrones (Primera parte de cinco)

La noche era plateada y serena. La luna llena iluminaba con tal intensidad que parecía querer rivalizar con la luz de su hermano sol. Allá arriba, desde su reino estrellado de las alturas, el satélite nocturno había sido testigo ruborizado del éxtasis amoroso de aquella pareja, oculta a plena vista en una azotea cualquiera de la aldea; entre tejados de tejas y gatos furtivos, pero lejos de los ojos indiscretos del pueblo durmiente. Ambos amantes estaban acostados bajo la manta y, a un lado de ellos y apoyados en el muro, estaban sus pertrechos: ropas oscuras con capucha, guantes, cuerdas, ballestas, ganchos... Nada de aquello había hecho falta para librar la dulce batalla que acababan de terminar. Yacían boca arriba, mientras él deslizaba sus dedos bailarines sobre la erizada piel del hombro de ella. Con la mirada perdida en la multitud de estrellas, los dos guardaron silencio, disfrutando de la quietud de la noche, y del poderoso latir de ambos corazones, extenuados tras haberse regalado con pasión caricias, besos, y algunos placenteros arañazos.

Este momento es perfecto ―reconoció Hanzo, que apartó la vista del firmamento para contemplarlo reflejado en los ojos de ella, escondidos tras el flequillo azul que caía alborotado desde la melena negra despeinada.

Kayra respondió con un profundo suspiro y una marcada sonrisa de felicidad en su rostro.

Todo está tranquilo... ―comentó ella―. Ojalá siempre fuera así.

Podría ser siempre así. Tan solo nos hace falta dar “un gran golpe”, en vez de conformarnos con esas baratijas que cogemos cada vez que encontramos una ventana abierta o una puerta mal cerrada.

¿Ah, sí? ―dijo ella interesada, acostándose de lado para ver directamente el rostro de Hanzo. Este seguía entretenido pasando la punta de su dedo por cada centímetro de piel descubierta de Kayra―. ¿Y cuál es ese “gran golpe”, si puede saberse?

Hanzo dejó de acariciarla, se recostó, apoyó la cabeza en las manos cruzadas en la nuca y miró al cielo antes de encogerse de hombros.

Ese es el problema: no tengo ni idea. Lo único que sé es que en este pueblo no vamos a encontrarlo. Aquí la mayoría son granjeros o artesanos. Esta gente apenas tiene para vivir, y empiezo a sentirme mal por ellos.

Un ladrón con conciencia... Pensaba que era la única...

Ya ves. A lo mejor no estamos hechos para esta vida, Kayra. Pero, ¿qué otro camino nos queda?

Quizás estamos equivocándonos , quizás... debamos elegir otro objetivo... otra víctima, que esté... más arriba ―Hanzo la miró con el ceño fruncido―. A lo mejor ―la chica empezó a pasear sus dedos por el pecho de él―, deberíamos robar el cetro del gobernador.

Hanzo soltó una risotada.

¿Sabes lo que nos pasaría si nos pillan? Robarle al gobernador no es como robar a estos pueblerinos. Nos condenarían a muerte, Kayra, y nos ejecutarían antes de que saliera el sol al día siguiente. Además, ¿dónde íbamos a venderlo si lo conseguimos robar? En la zona todo el mundo conoce el cetro. Para poder venderlo tendríamos que...

Irnos muy lejos ―Kayra clavó su mirada en él y dejó de acariciarle.

¿Lo dices en serio?

Ella asintió. Justo después, se envolvió en la manta y se sentó al lado de Hanzo, que se reclinó hasta apoyar su espalda en el muro de atrás.

Es muy arriesgado, Kayra. Nos estaríamos jugando nuestros cuellos, literalmente.

Pero si nos sale bien, podríamos dejarlo todo, Hanzo. Sería ese “gran golpe” del que hablabas antes.

Era solo una forma de hablar, Kayra, no lo decía en serio.

¿No lo decías en serio...?

Hanzo supo entonces que había dicho algo que no debería haber dicho. De modo que reaccionó encogiendo los hombros y guardando silencio. Kayra percibió las dudas de él.

¿Entonces lo de escapar juntos y vivir tranquilos tampoco iba en serio? ¿Tengo que suponer que lo que ha pasado esta noche tampoco iba en serio? Dime, Hanzo, ¿acaso no me tomas en serio y solo soy un divertimento nocturno para ti?

Kayra, estás sacando las cosas de contexto, yo solo...

Entonces explícate, porque si no vas en serio, no pienso perder más tiempo contigo.

Kayra, tranquila. Piensa en lo que me estás pidiendo. Se trata del gobernador... de su cetro. Nos jugamos la vida. Eso sí que es serio.

Vale, ya te entiendo. No hace falta que sigas hablando. Se nota que no quieres hacerlo ―Kayra se puso de pie con la manta sobre los hombros y fue derecha a donde había arrojado su ropa para comenzar a vestirse―. Ten muy en cuenta que yo lo voy a hacer, contigo o sin ti.

¿¡Qué!? Oye, no voy a dejar que te pongas en peligro tú sola. Además, es más probable conseguirlo con ayuda de otro... Kayra, por favor, entra en razón.

Pero ella seguía vistiéndose en silencio.

Vale, iré contigo. Tú ganas. Robaremos el dichoso cetro.

Con eso no te va a bastar.

Hanzo se pasó la mano por el pelo y resopló. No soportaba la idea de dejar que Kayra se expusiese sola al peligro.

¿Qué más quieres de mí, Kayra? Ya te he dicho que lo vamos a hacer... juntos.

Necesito que te impliques, Hanzo. Solo dices que me ayudarás, porque no quieres que me pase nada, pero esa decisión tienes que tomarla porque quieres estar conmigo y nada más. Ni más, ni menos. No me vale que me ayudes porque te doy pena.

Kayra, quiero ayudarte porque no quiero que te ocurra nada malo.

No es suficiente. Demuéstrame que estás comprometido, que de verdad quieres estar conmigo para siempre, pase lo que pase durante el robo.

Me voy a jugar la vida por ti. ¿Hace falta más?

Sí.

¿Y qué más hace falta?

Ella, ya vestida de negro ceñido, se pasó la cuerda cruzada en el pecho y luego enganchó el gancho sobre ella. A continuación, miró a Hanzo y respondió a su pregunta.

Cásate conmigo.

2 comentarios:

  1. ¡Hola Aio!

    Me gusta este comienzo. Una historia de amor enredada en un posible robo, y encima complicado... ¡Parece muy interesante!

    Una historia que sin duda promete :D ¡Ya tengo ganas de que llegue mañana! jejeje (Ya me he esperado a propósito XD Si no ¡luego me puede la intriga! )

    Nos leemos a la próxima. ¡Abrazo fuerte! ^^

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Carmen!

      Muy buen truco. Jejejeje. Espero estar a la altura y que te mole cómo se va desarrolando esta historia. Y muchas gracias por tus comentarios, siempre alegra leer tus mensajes.

      ¡Un abrazo fuerte! ¡Nos seguimos leyendo! ^^

      Eliminar